Historia de la literatura y del arte dramático en España, tomo IV - 19

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todo es traza_, comedia que V. Schmidt caracteriza con mucha exactitud,
recordando _El lazarillo de Tormes_ y _El Guzmán de Alfarache_, porque
el protagonista, en efecto, se asemeja mucho á aquellos caballeros de
industria, de espada y de retorcidos mostachos, descritos en esas
novelas picarescas; aunque no estará de más añadir que nunca Calderón se
deja caer en los lodazales que son, á veces, tan del gusto de Mendoza y
de Alemán, y que ennoblece á un tiempo las costumbres y los tiempos.
En _Guárdate del agua mansa_ no sólo el trazado y desarrollo del enredo
son de un arte consumado, sino que también brilla por la pintura de
caracteres, por su singular gusto y excelencia poco común. Don Alonso
tiene dos hijas, que, desde la muerte de su madre, se han educado en un
convento, que ambas abandonan al trasladarse su padre de Méjico á
Madrid. Clara, la hermana mayor, es pacífica y callada, y dice que á
todo prefiere el silencio del claustro. Eugenia, la menor, es, al
contrario, más viva y resuelta, agradándole el trato del mundo, razón
suficiente para que su padre se proponga casarla antes. Preséntanse
diversos pretendientes á su mano, y, entre otros, un hidalgo campesino,
sencillo y rústico, natural de Asturias, y de nombre Toribio, blanco de
continuas burlas de ambas doncellas. Mientras Clara reprueba los
proyectos, algo libres, de su hermana, urde ella el enredo más astuto,
haciéndose pasar por Eugenia, envolviendo en sus redes al futuro marido
que se le destina, engañando á la dueña que la guarda, y convirtiéndola
en auxiliar de sus planes. Resulta de esto, al cabo, que la viva y
mundana Eugenia no adelanta nada en sus amores, mientras la callada y
pacífica Clara se apropia sus pretendientes. El cándido y rústico
Toribio es un personaje hábilmente diseñado y de un carácter cómico
extraordinario, y de aquí que esta caricatura tenga semejanza con las
comedias llamadas de figurón.
_Mañanas de abril y mayo._--Esta es una comedia muy parecida á las
anteriores en espíritu y colorido, y que también se distingue por la
hábil pintura de sus caracteres. El antitipo, ó contraste de Toribio, es
en ésta un petimetre ilustrado y vanidoso. Calderón, sin embargo, no
usa nunca de ese estilo grosero y bajo, que tanto nos ofende en las
comedias de figurón de otros poetas; ni los personajes de caricatura son
nunca en las suyas las figuras más interesantes, sirviendo tan sólo sus
extravagancias para hacer resaltar más otros nobles caracteres.
_No siempre lo peor es cierto._--Podría clasificarse, por sus personajes
y por sus contornos exteriores, entre las comedias de capa y espada;
pero su tono más serio, casi sentimental, y su argumento, la separan
evidentemente de las demás producciones de esta clase. Don Carlos,
amante de Doña Leonor de Lara, encuentra de noche un hombre en el
aposento de su dama, tomándolo por su rival equivocadamente, y, bajo el
imperio de otras diversas circunstancias, le da muerte impulsado por sus
celos. Para salvar el honor de su amada, se la lleva consigo y la
protege, considerándola culpable, y sin prestar atención alguna á sus
protestas de inocencia. Un concurso de muchas concausas, y una acción
accesoria enlazada hábilmente con la principal, contribuyen á aumentar
más y más las sospechas de Carlos, y casi á inspirar dudas á los
espectadores, hasta que al fin aparece la verdad en todo su esplendor, y
Carlos se convence de que Leonor le ha sido siempre fiel. Si nos admira
en este drama el desarrollo de la fábula, por el ingenio delicado de su
autor, no nos encanta menos su argumento principal por los caracteres de
Don Carlos y de Leonor, trazados con tanta fuerza como gracia: el del
uno, de nobles y magnánimos pensamientos, y arrastrado, no obstante, por
esas mismas cualidades á concebir sospechas injustas, y el de Leonor,
por su dulzura y por su afecto constante á aquél, que tanto la ofende.
Ambos personajes excitan nuestro interés en sumo grado.
_Mañana será otro día._--Análoga á la precedente, «Si la primera, dice
V. Schmidt, nos da á conocer la índole divina de la mujer, que,
mortificada por una desconfianza injusta, deja ver todo el mérito de su
carácter, por cuya razón Leonor aparece desde un principio enamorada,
debiendo á este mismo amor su desdicha, en ésta se nos ofrece una flor,
aún no abierta, que se desenvuelve á nuestra vista, y resplandece á los
rayos del sol del amor, ostentando sus perfumes y sus colores
magníficos. Al ruido de las espadas y al oprobio, cuya consecuencia ha
de ser la muerte entre esos nobles españoles de Calderón, crece ese amor
celestial de la mujer, que sólo teme la pérdida de su amante, moviendo
al fin la misericordia de un Dios compasivo y bondadoso.»
Aseméjanse también á estas últimas, ya por su fábula y por el colorido
serio, que en ellas predomina, ya por su característico más importante:
_No hay cosa como callar_, _Primero soy yo_, _Cuál es mayor perfección_,
_La desdicha de la voz_ y _Dar tiempo al tiempo_. Todas estas comedias
de la edad más provecta de Calderón, por la pureza del estilo y por el
mayor esmero con que se distinguen sus varios personajes, son, sin duda,
superiores á las demás obras suyas que les precedieron; pero en cambio,
á nuestro juicio, no se muestra tan vigorosa esa frescura juvenil y esa
animación propia de las demás, notándose á veces como cierto cansancio y
repetición amanerada de motivos dramáticos manoseados.
Hay una sola comedia de Calderón, de las llamadas burlescas, que se
titula _Céfalo y Procris_, parodia de otra suya, _Celos aun del aire
matan_. Esta pieza burlesca es de mucha gracia, haciendo alarde el poeta
de agudezas y chistes extremados, y ofreciendo, además, un efecto cómico
incomparable, porque las burlas más desatinadas y hasta las más absurdas
revisten tono patético, y se expresan en elegantísimos versos. Es la
única comedia de Calderón, en que lo grosero y lo ordinario se usan como
incentivos de lo cómico; con libertad extraordinaria eleva lo más bajo,
y hasta se mofa en apariencia de sí mismo, de todo el mundo y de su
propia obra. Los actores se olvidan sin cesar de sus papeles: una dama
griega, por ejemplo, al contar su nacimiento, dice sencillamente que es
hija de Luis López, y que se llama María. El príncipe Rosicler monta en
un jacucho, trayendo en la mano un zapato monstruoso, y recorre toda la
tierra para buscar la dama á quien pertenece aquella enorme lancha. Los
versos siguientes darán una idea del tono, que domina en toda la
composición. El Rey habla en estos términos á sus vasallos reunidos:
Vasallos, deudos y amigos,
Cuya lealtad y virtud
Canta el sol por _fa_, _mi_, _re_,
La fama por _re_, _fa_, _ut_;
Ilustre nobleza y plebe,
Que al brindis de mi salud
Agotárades ahora
Aun la cuba de Sahagún:
Ya sabéis que yo, inclinado
Fuí desde mi juventud
Á las letras, estudiando
Todo el ban, ben, bin, bon, bun,
Hasta el arte de Nebrija
Y las tablas del Talmud.
Céfalo, después de matar con un venablo á su querida Procris, exclama
así:
República celestial,
Aves, peces, fieras, hombres,
Montes, riscos, peñas, mar,
Plantas, flores, yerbas, prados,
¡Venid todos á llorar!
Coches, albardas, pollinos,
Con todo vivo animal;
Pavos, perdices, gallinas,
Morcillas, manos, cuajar,
¡Procris murió! Decid, pues:
¡Su moño descanse en paz!
Hemos hecho mención hasta ahora, ya prolija, ya ligeramente, de todas
las comedias auténticas de Calderón; en cuanto á aquéllas, reputadas
evidentemente por falsas, aunque lleven su nombre, ó sobre las cuales se
abrigan dudas muy fundadas, así como respecto á los sainetes y loas,
puede consultarse el apéndice, que ilustra esta parte de nuestra obra.
Vamos á tratar en seguida de sus autos sacramentales.
[Illustration]
[Illustration]


ÍNDICE.

Págs.
CAPÍTULO XXVIII.--ALARCÓN.--Sus obras dramáticas. 7
CAPÍTULO XXIX.--Felipe Godínez.--Luis de Belmonte.--Rodrigo
de Herrera.--Otros dramáticos de este
tiempo. 31
CAPÍTULO XXX.--El italiano Fabio Franchi acerca del
arte dramático en España. 59
CAPÍTULO XXXI.--Actores famosos de la época de Lope
de Vega. 71
CAPÍTULO XXXII.--Otros actores famosos de la época
de Lope de Vega.--El teatro español en el extranjero. 97

TERCER PERÍODO.
EDAD DE ORO DEL TEATRO ESPAÑOL.
CAPÍTULO PRIMERO.--Afición de Felipe IV al arte
dramático.--Teatro Real del Buen Retiro.--Fiestas de
corte y lujo de decoraciones. 121
CAPÍTULO II.--Nueva época de la poesía dramática.--Nuevas
especies de piezas dramáticas.--Aparato escénico
de esta época.--Principios de la decadencia del teatro
español en el reinado de Carlos II. 153
CAPÍTULO III.--CALDERÓN.--Carácter general de sus
obras dramáticas. 189
CAPÍTULO IV.--Otras bellezas dramáticas, comunes á
las comedias de Calderón, que las caracterizan y distinguen. 227
CAPÍTULO V.--Defectos de Calderón.--Clasificación
cronológica de sus obras dramáticas.--Su versificación.--Otros
defectos de sus comedias.--De los errores históricos
y geográficos de Calderón. 249
CAPÍTULO VI.--Comedias religiosas de Calderón.--_El
Príncipe constante._--_El Josef las mujeres._--_El mágico
prodigioso._--_Los dos amantes del cielo._--_El purgatorio
de San Patricio._ 289
CAPÍTULO VII.--_Las cadenas del demonio._--_La exaltación
de la Cruz._--_La devoción de la Cruz._--_Origen, pérdida y
restauración de la Virgen del Sagrario._--_La cisma
de Ingalaterra._--_La aurora en Copacavana._--_El
gran príncipe de Fez._--_San Francisco de Borja._--_La sibila
del Oriente._--_La estatua de Prometeo._--_La vida es
sueño._ 321
CAPÍTULO VIII.--Dramas históricos de Calderón.--_La
niña de Gómez Arias._--_El postrer duelo de España._--_El
médico de su honra._--_A secreto agravio, secreta venganza._--_Las
tres justicias en una._ 347
CAPÍTULO IX.--_El alcalde de Zalamea._--_Amar después
de la muerte._--_Luis Pérez el Gallego._--_El sitio de Breda._--_Gustos
y disgustos son no más que imaginación._--_Saber
del mal y del bien._--_En esta vida todo es verdad y
todo es mentira._--_El mayor monstruo los celos._--_Los cabellos
de Absalón._--_Las armas de la hermosura._--_La
gran Cenobia._ 369
CAPÍTULO X.--_La hija del aire._--Comedias mitológicas
y otras caballerescas y novelescas de Calderón. 401
CAPÍTULO XI.--Comedias románticas de Calderón. 433
CAPÍTULO XII.--Comedias de _azar_ y algunas otras de
Calderón. 459
_Este libro se acabó de imprimir
en Madrid, en casa de
Manuel Tello, el día
18 de Noviembre
del año de
1887._
[Illustration]

FOOTNOTES:
[1] «Joannes Ruiz de Alarcon, Mexici, ut credo, apud orientales indos
natus, ex Hispania oriundus, comoediarum auctor, parentum memoria, inter
eos, qui classem hujus artis ducunt, meo judicio annumerandus, et vix
uni aut alteri puritate dictionis urbanitateque et copia atque
inventione comparandus.»--(_Bibl. Hisp. Nova_, tomo I.)--Juan Ruiz de
Alarcón, nacido, según creo, en Méjico, cerca de los indios orientales
(probablemente orientales con relación á América, no con relación á
Europa), de una familia española y distinguida, autor de comedias, digno
de ser mencionado, á mi juicio, entre los primeros escritores de este
arte, y al que igualan sólo pocos en la pureza de su dicción, en su
aticismo y en su fecundidad y abundancia.--(_T. del T._)
[2] _Crónica de la provincia de San Diego de Méjico de religiosos
descalzos de San Francisco_, por Baltasar de Medina: Méjico, 1882, fol.
251.
[3] Debo esta noticia al Sr. H. Ternaux Compans, poseedor de este libro
raro.
[4] V. á Ferdinand Denis, _Chroniques chevaleresques de l'Espagne et du
Portugal_: París, 1839, vol. II, página 237.
[5] El teatro de Alarcón es una de las mayores rarezas bibliográficas.
De los dos tomos de que consta, sólo un ejemplar he llegado á ver, cuyo
primer tomo existe en la Biblioteca Real de París, y el segundo en
posesión del Sr. Luis Lemcke, en Brunswick, á quien estoy sumamente
agradecido por su amabilidad en haberlo dejado largo tiempo á mi
disposición, juntamente con otras muchas joyas de su rica biblioteca
española. Copio aquí el índice de ambas partes:
Comedias de D. Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza. Madrid, en casa de Juan
González, 1628, 4.
_Los favores del mundo._--_La industria y la suerte._--_Las paredes
oyen._--_El semejante á sí mismo._--_La cueva de Salamanca._--_Mudarse
por mejorarse._--_Toda es ventura._--_El desdichada en fingir._
Parte segunda de las comedias del licenciado D. Juan Ruiz de Alarcón y
Mendoza. Barcelona, Sebastián de Cormellas, 1634, 4.
_Los empeños de un engaño._--_El Dueño de las estrellas._--_La amistad
castigada._--_La manganilla de Melilla._--_Ganar amigos._--_La verdad
sospechosa._--_El Antichristo._--_El texedor de Segovia._--_Los pechos
privilegiados._--_La prueba de las promesas._--_La crueldad por el
honor._--_El examen de maridos._
Conozco también, sueltas, á _Quien mal anda mal acaba_, y _No hay mal
que por bien no venga_.
En el catálogo de la Huerta llevan también el nombre Alarcón: _Dar con
la misma flor_, _La culpa busca la pena y el agravio la venganza_, _La
Hechicera_, _Siempre ayuda la verdad_ y _Quien priva aconseje bien_.
[6] _El tejedor de Segovia_, en las sueltas, se atribuye, ya á Calderón,
ya á Rojas; _La verdad sospechosa_, á Lope de Vega, en el tomo XXII
(apócrifo) de sus comedias: Zaragoza, 1630; _El examen de maridos_, en
las sueltas, ya lleva el nombre de Montalbán, ya el de Lope, y también
el de éste en el tomo XXIV de las _Comedias de Lope de Vega_: Zaragoza,
1633.
Estas falsificaciones de los autores de las comedias son sólo imputables
á la ignorancia ó á la codicia de los libreros, no á los poetas, cuyos
nombres llevan trocados.
[7] La familia noble de Vargas es nombrada en _Don Quijote_, parte 1.ª,
capítulos 8.º y 49; véanse también las notas de D. Diego Clemencín. Los
traidores Peláez juegan ya un mal papel en los romances del Cid; véanse
los romances números 36 y 37 de la edición de Juan de Escobar.--Nada he
podido averiguar de la tradición especial, dramatizada por Alarcón.
[8] Véase mi _Spanisches Theater_. Frankfurt auf der Mein, 1845.--T. I.
[9] Corneille dice de su _Menteur_: «Esta pieza es en parte imitación, y
en parte traducción de otra española. Paréceme su asunto tan ingenioso y
tan bien desenvuelto, que me ha hecho decir con frecuencia que daría de
buen grado dos de mis mejores composiciones dramáticas porque esa
invención hubiera sido mía. La comedia española es atribuída al famoso
Lope de Vega; pero hace poco llegó á mis manos un tomo de D. Juan Ruiz
de Alarcón, afirmando haberla él escrito y quejándose de los libreros
por imprimirla bajo otro nombre. Sea quien fuere su autor, es lo cierto
que su mérito es grande y que no conozco nada en esa lengua que más
placer me haya proporcionado.»
[10]
Este, que tiene, como mes de mayo,
Florido ingenio, y que comienza ahora
Á hacer de sus comedias nuevo ensayo,
Godínez es.
(Cervantes, _Viaje al Parnaso_.)

[11] _Ludovicus de Belmonte, comœdiarum poeta, vel eo tempore
audiebatur in theatris, quo, sub Lupo de Vega et aliis, Hispana
comœdia alias omnium gentium omnisque aetatis probocabat: idem cum eo
qui inscripsit._
_Hazañas de Don García Hurtado de Mendoza_, 1622, 4.º--D. Nicolás
Antonio, _Bibliotheca Nova_.
Luis de Belmonte, poeta, escritor de comedias, era oído también en los
teatros en la misma época en que la comedia española, con las obras de
Lope de Vega y de otros, aventajaba á las de todas las demás naciones de
todos los tiempos; es el mismo que escribió las _Hazañas de Don García
Hurtado de Mendoza_, 1622.
[12] _El diablo predicador_, en dos manuscritos de la biblioteca del
duque de Osuna, se atribuye á Francisco de Villegas; particularidad que,
no siendo autógrafos estos manuscritos, nada prueba contra la opinión
común de que fuera su autor Belmonte. Por lo demás, el argumento de esta
comedia famosa (probablemente antes), fué desenvuelto por Lope de Vega
en su _Fray diablo_. En la biblioteca del duque de Osuna se encuentran
manuscritas de Belmonte las comedias:
_El sastre del Campillo_, autógrafa, con la firma de Luis de Belmonte
Bermúdez: _1.º de augusto 1624_. (Las impresiones antiguas la atribuyen
á Lope.)
_El satisfecho_, autógrafa, con firma, fecha en Sevilla, el 5 de julio
de 1634.
_El conde de Fuentes._
_El hortelano de Tordesillas._
_A un tiempo rey y vasallo_, autógrafa, con firma y licencia de 1642.
D. Agustín Durán poseía una comedia manuscrita de Belmonte, titulada _El
acierto en el engaño y robador de su honra_, fecha en diciembre de 1641.
De la licencia que la acompaña, resulta que se prohibió al principio por
indecente, y que se alzó después esa prohibición.
[13] _Hijos ilustres de Madrid_, por Baena.--Lope, _Laurel de Apolo_.
[14] _Hijos ilustres de Madrid._
[15] Comedias humanas y divinas, y rimas morales, compuestas por Diego
Muxet de Solís: Bruselas, 1624. (D. Nicolás Antonio dice,
equivocadamente, que el lugar de la impresión es Francfort.)
Las piezas sueltas son: _Cómo ha de ser el valiente_, _La igualdad en
los sujetos_, _El cazador más dichoso_, _El generoso en España_, _El
mayordomo de la duquesa de Amalfi_, _El ermitaño seglar_.
[16] Montalbán, _Para todos_.
[17] Montalbán y Lope, _Laurel de Apolo_.
[18] _Hijos ilustres de Madrid._
[19] _Hijos ilustres de Madrid._
[20] Todos estos nombres y noticias se han tomado de los _Hijos ilustres
de Madrid_, de Baena, y del _Para todos_, de Montalbán.
[21] Fuster, _Biblioteca valenciana_.
[22] D. Nicolás Antonio.
[23] Muchos de los mencionados, como Montemayor, Silvestre y
Garci-Sánchez, se llaman sin razón poetas dramáticos.
[24] Con arreglo á la indicación que se hace en el tomo II de las
comedias de Francisco de Rojas (Madrid, 1645), Antonio Coello es el
autor de la primera jornada de esta pieza, y Rojas de las dos restantes.
[25] Cascales, _Tablas poéticas_, lib. II.--Christóbal Suárez de
Figueroa, _Plaza universal de ciencias y artes_ (1615), discurso 91 de
los comediantes y autores de comedias: «España ha tenido y tiene
prodigiosos hombres y mujeres en representación, entre otros Cisneros,
Gálvez, Morales _el Divino_, Saldaña, Salcedo, Ríos, Villalva, Murillo,
Segura, Rentería, Angulo, Solano, Tomás Gutiérrez, Avendaño, Villegas,
Mainel: éstos ya difuntos. De los vivos, Pinedo, Sánchez, Melchor de
León, Miguel Ramírez, Granados, Christóbal, Salvador, Olmedo, Cintor,
Jerónimo López. De mujeres, Ana de Velasco, Mariana Páez, Mariana Vaca,
Jerónima de Salcedo, difuntas. De las que hoy viven, Juana de Villalva,
Mariflores, Micaela de Luján, Ana Muñoz, Josefa Vaca, Jerónima de
Burgos, Polonia Pérez, María de los Angeles, María de Morales, sin otras
que por brevedad no pongo.»
[26] Bourgoing, _Viaje á España_, tomo II, pág. 56.
[27] Del artículo de Mesonero Romanos, sobre la topografía de Madrid,
tantas veces citado, resulta que la calle del León era antes algo más
ancha, desde la del Prado hasta las de Francos y Cantarranas, y formaba
una plazuela con árboles, llamada «El mentidero de los representantes,»
sin duda por reunirse en ella los actores y aficionados al teatro, como
sucedía hasta hace poco con la plazuela de Santa Ana. El mismo nombre
lleva en el gran plano de Madrid, de 1656; en los escritos de Quevedo,
Lope, Villamediana y otros, y, por último, en el testamento del obispo
de Cuzco, D. Manuel de Mollinedo y Angulo, el cual dice expresamente que
sus padres vivían en Madrid, en la calle del León, «Mentidero de los
representantes.» Esta parte de la corte está toda llena de recuerdos de
los famosos poetas dramáticos y actores que la frecuentaban o habitaban.
Consta de los documentos de esa época, que residieron en ella todos los
célebres actores y actrices de los siglos XVII y XVIII, desde Agustín de
Rojas y Alonso de Olmedo, hasta Manuel García Parra y Mariano Querol, y
desde María Riquelme y María Calderón, hasta la Ladvenant y la Tirana,
viviendo en las calles de las Huertas, Amor de Dios, San Juan, Santa
María, Francos, Cantarranas y León; costumbre seguida por los actores y
actrices modernos, hasta hace poco, como Rita Luna, Isidoro Máiquez,
Guzmán, Latorre, Romea y otros.
[28] Están sacadas de muchas y varias obras antiguas españolas, como de
_El peregrino en su patria_, de Lope, y de los prólogos de sus comedias;
de la _Filosofía poética_, de López Pinciano; de las _Tablas poéticas_,
de Francisco Cascales; de _El gran tacaño_ y otros escritos de Quevedo;
de la _Plaza universal_, de Suárez de Figueroa; de la novela _La garduña
de Sevilla_, de Alonso del Castillo Solorzano (Logroño, 1634), etc.
Otras provienen del tomo II del _Tratado histórico_, de Pellicer.
[29] He aquí algunas noticias y anécdotas de autores célebres de la edad
de oro del teatro español:
«_Epistolae Hoelianae. Familiar letters domestic and forren._ By James
Howell. 2nd edition, London, 1650. Vol. II, pág. 111, carta de Madrid
de 1.º de agosto de 1622:
«To this I will join an epigram which was made of de Vaca husband to
Jusepa de Vaca the famous comedian, who came upon the stage with a cloak
lined with black plush and a great chain about his neek, where upon the
duke of Mediana broke into these witty lines.»--Añadiré á esto un
epigrama, compuesto contra el famoso comediante Vaca, marido de la
Jusepa de Vaca, que salió á la escena con una capa con vueltas de felpa
negra, y una gran cadena al cuello, con cuyo motivo el duque de Mediana
improvisó estos ingeniosos versos: (_T. del T._)
«Con tanta felpa en la capa
Y tanta cadena de oro,
El marido de la Vaca,
¿Qué puede ser sino toro?»
_Comedias de Lope de Vega_, tomo XIX, prólogo dialogístico:
«Preguntó Cisneros, representando, á un alcalde, que por qué estaba
preso un estudiante que, entre otros, salía á visita.--Díjole el
escribano que por una sátira.--¿Qué es sátira? replicó Cisneros.--Sátira
es, dijo el escribano, decir las faltas de los del lugar.--Y respondió
Cisneros:--¿Pues no sería mejor prender á los que tienen las faltas?»
_Comedias de Lope de Vega_, tomo XVII. Dedicatoria á Jorge Toledano
(comedia de las antiguas mías):
«Hacía el Jorge Toledano aquel insigne representante de Toledo Solano, á
quien en la figura del galán, por la blandura, talle y aseo de su
persona, nadie ha igualado. Roma nos dejó una memoria de sus famosos
histriones; no parezca exceso á la modestia y circunspección de muchos,
alabar estos hombres, pues no los vió semejantes, cuando más su
república florecía.»
_Comedias de Lope de Vega_, tomo XVI: Madrid, 1622. Prólogo:
«Como se acabaron los Cisneros, los Navarros, Loyolas, Ríos, Solanos,
Ramírez, Tapias, Leones, Rochas, Salvadores y Christóvales, ¿qué han de
hacer los Autores, sino, convertidos en Bolatines, remitir á las
tramoyas las comedias?»
_Caramuelis Rhythmica. Editio altera. Campaniae_, 1668, págs. 706 y
siguientes.
«Arias habet vocem claram et puram, memoriam firmam et actionem vivacem,
et quidquid ipse diceret in singulis linguae motibus charites et in
singulis mannum videbatur habere Apollines. Ad eum audiendum confluebant
excellentissimi concionatores, ut dictionis et actionis perfectionem
addiscerent.
»Sub idem tempus Amaryllis (sic eam vocabant), inter comicas floruit,
quae erat prodigiosa in sua arte. Eloquebatur, canebat, musicis
instrumentis ludebat, tripudiabat, et nihil erat, quod cum laude et
aplausu non faceret.
»Paucis post annis theatra adsurgebant Riquelmae, adolescenti pulchrae,
aprehensiva tam forti praeditae, ut inter loquendum vultus colorem cum
omnium admiratione mutaret: nam si in theatro fausta et felicia
narrarentur, roseo colore suffusa auscultabat; si autem aliqua infausta
circunstantia intercurreret, illico pallida reddebatur. Et in hoc erat
unica, quam nemo valeret imitari.
»Fuerunt et sunt alii Comici, in quibus magnae hujus generis dotes
relucent. Ego nomino, quos puer cognovi, nam a juventute excedi ab
Hispania jussus, comedias audire non potui.»Quia magna interdum ingenia
pereunt in aratro, quae si colerentur, possent patriae et scholae
servire, hunc casum addo. Barrueli (pagus est non longe a Spinensi
coenobio jacens in antiquâ Castellâ), interfui Divinis mysteriis die
nascenti Deiparae consecrata. Musica fuit expectatione melior, et omnia
urbano potius quam pagano ritu agebantur. Ad offertorium surrexerunt
Confratres, et singuli suum munus obtulerunt Angelorum reginae, alli
taciti, alii carmina recitantes, alii cantantes, et applausum
praeceteris habuit quidam juvenis, qui muti personam adsumens, manibus
et gestibus loquens, ut panis, vini et pecorum copiam et valetudinem
Diva populo universo concederet, motibus tam vivis expressit, ut mentis
suae conceptus clarius et melius explicare verbis non posset. ¿Et quid
iste non faceret, si a pueritia habuisset Magistros idoneos?
»Matriti semel Arias sibi legens epistolam in theatrum ingressus, longo
tempore habuit Auditores suspensos, ad singulas lineas percellebatur, et
demum furore percitus laceravit epistolam et incipit exclamare
vehementisima carmina. Et tamesi laudaretur ab omnibus, majorem illa die
agendo quam loquendo admirationem extorsit.»
Arias tiene voz clara y pura, tenaz memoria y acción animada, y
cualquiera cosa que dice, parece que las Gracias le acompañan en cada
palabra y Apolo en cada movimiento de sus manos. Acudían á oirlo los más
sobresalientes oradores para perfeccionarse en la elocución y acción.
En este mismo tiempo floreció Amarilis (así la llamaban), entre las
actrices, prodigiosa en su arte. Declamaba, cantaba, tañía instrumentos
músicos, bailaba, haciéndolo todo con alabanzas y aplausos.
Pocos años después se presentaba en el teatro la Riquelme, bella joven,
tan sensible por naturaleza, que, con admiración de todos, variaba de
color, según el diálogo: si el asunto era alegre y fausto, su color era
sonrosado, y si sobrevenía algo triste, se ponía en seguida pálida. En
esto era tal, que nadie pudo imitarla.
Hubo además otros cómicos que se distinguieron por sus notables dotes.
Hablo sólo de los que conocí cuando niño, porque, obligado á dejar á
España joven, no pude oir más comedias.
Como prueba de que á veces vegetan grandes ingenios arando, que,
cultivados, hubiesen dado lustre á los estudios y á la patria, cito este
caso. Asistí en Barruel (aldea sita no lejos del convento de Espina, en
Castilla la Vieja) á los misterios divinos, que se celebraban el día
consagrado á solemnizar el nacimiento de la Virgen. La música fué mejor
de lo que esperaba, y toda la fiesta parecía más propia de ciudad que de
aldea. En el ofertorio se levantaron todos los hermanos, trayendo cada
uno su ofrenda á la Reina de los Angeles; unos callados, otros recitando
versos, otros cantando, y hubo un joven, que obtuvo los mayores
aplausos, el cual, representando el personaje de un mudo y accionando y
gesticulando para que la Virgen concediera á todo el pueblo salud y
abundancia de pan, de vino y ganados, lo expresó con sus movimientos tan
viva y elocuentemente, que con mayor claridad y distinción no hubiese
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